Los productos que más me llamaron la atención fueron, entre otros, el de las pulseras de huesos, el que cambia la cara o el de el vino. Al principio puede parecer que ninguno de los tres son muy prácticos, pero yo no lo creo.
El primer invento trata de unas pulseras qe están hechas con una parte de los huesos de la gente, y este invento aunque me haya impresionado no me ha gustado para nada. Me parece muy macabro y bastante asqueroso.
El segundo invento en cambio, aunque parezca también que es sólo estético yo le encuentro importancia médica. Se trata de implantarse una especie de red debajo de la piel de la cara y cada vez que quieras tener los labios más carnosos o la nariz más pequeña, ésto te ayuda. Pero yo no lo veo sólo como un problema de imagen, sino que también puede ayudar a personas que tienen por ejemplo unas manchas en la piel que les dan vergüenza, o les ayudarían a tapar cicatrices o marcas de algún accidente, etc. Cosas que se arreglarían con una operación de varias horas.
Y por último el tercer invento me ha llamado la atención pero también negativamente, ya que se trata de una especie de caja, en la que tu metes un vaso o una botella de vino cualquiera, y escogiendo el sabor, el color, etc, puedes escoger el tipo de vino que quieres. Pero a mi este invento no me ha gustado, porque yo creo que el vino que creas se puede parecer al vino original, pero nunca será igual. Yo creo que en este caso la calidad está antes que el hecho de ser práctico.
En resumen la nanotecnología sirve para muchas cosas en la vida pero su fin es facilitárnosla.
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